Y entonces ella


Creer nuevamente haber encontrado singularidad en unos ojos
en esta sucesión de sombras indiferenciables que sois todas,
y errar en la percepción…
nuevamente.
Es el sesgo de subjetividad de quien desea encontrar
algo distinto a un gigante “SIGA BUSCANDO”
en letras de neón
cuando rascas y no ganas

cuando rascas y no ganas
cuando rascas
y no ganas.
Y entonces, un día, entonces ella.
Y tú piensas que es una nueva ilusión de oasis,
que pronto se revelará sueño o mentira,
que mejor no cruces en ámbar
porque ella te mira con una mirada
que se mide en Imperios caídos,
ella mira así y entonces los puentes
se tiran desde lo alto de los suicidas,
te mira así y la alternativa es huir o perder.
Pero en seguida ella zanja todo debate cuando te explica,

no te equivoques
yo también estoy harta de derrotas
y sin embargo, mira, toca aquí
y tú notas cómo le late la clavícula a todo tambor
mientras te dice ¿esto? eres tú
y es lo único que me importa, atiende:
un día contarán nuestra historia
y podrán decir que perdimos,
pero por mis santos ovarios
te juro que nadie podrá decir de nosotros
que tuvimos
miedo.


KARIM CHERGUI


Comentarios

  1. Eso: nunca dirán que nos quedamos por miedos.
    Uffff!!! :/

    ResponderEliminar
  2. ¡Qué bonito! Muchas gracias por compartirlo.
    Lourdes :-)

    ResponderEliminar

Publicar un comentario